La díada que somos: mamá-bebé





Hoy quiero compartirles una de las experiencias más sorprendentes que he tenido con mi hijo Luca.








Luca tiene ya dos años y tres meses y, aunque pasa todo el día "hablando", él ha inventado un idioma propio con el cual se comunica. Obviamente yo, mamá, le entiendo todo lo que dice: y cómo no si pasamos todo el día juntos. Luca es mi gran compañero. Dicho así, el color amarillo es "nan"; el chocolate, "totoi"; la miel, "mam"; los perros, "popou"; su amiga María se llama "Am"; su amigo Ezequiel, "Ay".... y así podría enlistar un buen número de ejemplos. 

También debo agregar que yo amo su léxico y me causa mucha gracia escucharlo hablar así. Sin embargo, hasta hace unas semanas me di cuenta que otros nenes de su edad, si bien no hablan a la perfección (bueno, algunos sí!! hasta cuentan chistes, verdad Mauro??), lo hacen con bastante aproximación, repiten las palabras que les dicen los adultos, articulan.

Esto me dió pauta a reflexionar un poco sobre lo que siempre hablamos entre "co-madres": sobre la díada mamá-bebé, sobre el hecho de que las cosas que mamá experimenta, las vive bebé también, pues son un mismo ser emocional. 

Entre nosotras hemos constatado varias veces por experiencias compartidas cómo cuando compartimos con nuestros hijos las cosas que nos pasan, emocionalmente, sobretodo aquéllas que vienen de nuestra sombra bien guardada y que se desvela con la maternidad, los pequeños logran salir de enfermedades, calman sus ansiedades, duermen mejor, lloran menos, etc., etc., etc.

Sumado a lo anterior, tuve también hace poco la fortuna de conocer a un maestro Kundalini quien me comentó que ellos consideran que el aura de la madre y la del bebé es la misma hasta alrededor de los dos años...

Y entonces, días después, con todo esto en la cabeza, logré traer desde mi sombra y reconocerme en una dificultad propia para la comunicación. En mi familia, siempre ha sido difícil decirnos las cosas que sentimos, que pensamos.... Así crecí, con miedo a hablar, a decirle a los demás cómo me siento, qué es lo pienso en particular, insegura. Y entonces comencé a hablar con Luca de esto, varias veaces. Le dije cómo se desarrollaban estas situaciones en mi niñez, cómo ha sido un obstáculo en mi vida y cómo hoy soy posible de reconocerlo.

Un día después de tener estas conversaciones con Lu, maravillsoamente comenzó a repetir palabras: ya no dice "au", dice "agua", ya no dice "ay", intenta decir "azul". Me dice "ven", "ten", "pista", "rampa", al perro le dice por su nombre, dice "lodo", "pala"... Luca logró, a través de mi autorreflexión, romper el obstáculo que le impedía hablar con libertad. Ahora lo veo feliz cómo intenta decir todo, hablarme, decirme más cosas cada día!!

Me emociona mucho poder compartir esta experiencia y poder agradecerle a mi comunidad, a mis COmadres, por ser siempre compañeras en la maternidad, por ser mi contención, por ser amigas.

Las quiero.

Comentarios

  1. Maribel, gracias por esta marvillosa reflexión, aun q siempre comentamos lo importante q es hablarles a nuestros hijos, a veces se me olvida q también hay q decirles por q estamos tristes, nuetras dificultades en diferentes niveles y q articular esto es de gran ayuda en su desarrollo.

    Con tus sinceras palabras me llevas a reflxionar sobre esta situación q siempre hay q tener en cuenta!

    Ante todo diada, ante todo honestidad con nosotras mismas para poderlo compartir con nuestros bebés!!

    GRACIAS!!

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  2. Wow! que experiencia, y de nuevo aqui viene el aprendizaje y el crecimiento que he logrado desde que las conozco, Maribel gracias de verdad por compartirnos esto; y bueno cuando iba leyendo me vino a la mente Majo diciendo varias cosas, gritando "Hola ¿Que haces?", "caca" y algunas otras palabras que ya se le entienden y a la par de eso me vino también la imagen de mi en una situación de ayer en la que me deje llevar por mis impulsos y dije sin mucho tacto pero muy sincera y francamente lo que sentía y es que en general suelo ser asi, bueno Majo y yo somos así, definitivamente aunque físicamente y en otras cosas sea tan parecida a su papa, en el corazón y el alma estamos enlazadas.
    De nuevo gracias co-madres, las quiero.


    Ely

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  3. Gracias Maribel, que impactante leer su experiencia, me haces pensar en una salida, una la sabe pero no la tiene presente, esto de hablarle a nuestros hijos lo que nos pasa, te lo digo por que en este camino de crecimiento uno se va dando cuenta de tantas cosas y muchas de esas dolorosas y que luego ahí siguen presentes, apareciendo una y otra vez, ante esto me causa frustración e impotencia por que sé como estas situaciones repercuten en los hijos. Al escuchar tu relato vi una salida, platicar con mis hijas, de mis temores, de mi infancia,de mi historia, sobre todo de la que no les quiero heredar.
    Gracias un beso y un abrazo a los dos

    Karla

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  4. HOLA MI NOMBRE ES LILIANA Y MI HIJO SE LLAMA SERGIO EL TIENE YA 3 AÑOS 3 MECES Y LA VERDAD E SUFRIDO EL BOMBARDEO DE MI FAMILIA DICIENDOME QUE NO HABLA BIEN PERO JAMAS PENSE QUE LO QUE COMENTAS MARIBEL SEA ASI DE SENCILLO NO HABIA REFLECCIONADO EN ELLO Y LA VERDAD ME DA PAUTA A EXPERIMENTAR ESTE TIPO DE EXPERIENCIAS EN BENEFICIO DE MI BB Y DE LA MANERA EN QUE ME DIRIJO A EL GRACIAS PO SUS EXPERIENCIAS

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  5. Gracias a todas ustedes!! Siempre han sido inspiración. Luca y yo seguimos creciendo y aprendiendo juntos. Liliana, él tiene ahora casi tres años y tampoco habla del todo bien, pero experimenta y expresea TODO en sus propias palabras. Desde que hablo más con él de estas cosas, no para de hablar, aunque su dicción no sea perfecta.
    Mi conclusión, halbar con ellos, hablar de todo, abrir el corazón.

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  6. La maternidad es un lugar mágico y maravilloso muy personal (en diada) que nos sorprende a diario y cuando leemos esto como lo tuyo nos enriquecemos y a muchas nos hace ver que no hemos enloquecido aolo estamos aprendiendo a conocernos a través de nuestros bbs y a ser madres de ellos!! Gracias co.madres! Comadre Paty

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