Co-mentario sobre una crianza diferente.



¡Fragmento que nos anima a seguir fomentando criar en comunidad!




Queridas co-madres:

Hay algunos pensamientos me gustaría compartir con ustedes, y que tienen que ver con la profunda admiración y respeto que me provoca verlas imaginando un mundo en el que ustedes y sus hijos sean capaces de responder por sus propios deseos con alegría y responsabilidad.

Todo lo que es producido por la subjetivación capitalística —todo lo que nos llega por el lenguaje, por la familia y por los equipamientos que nos rodean— no es sólo una cuestión de ideas o de significaciones por medio de enunciados significantes. Tampoco se reduce a modelos de identidad o a identificaciones con polos maternos y paternos. Se trata de sistemas de conexión directa entre las grandes máquinas productivas, las grandes máquinas de control social y las instancias psíquicas que definen la manera de percibir el mundo.

Al final, no conocemos otro tipo de actitudes ni maneras de relacionarnos que no sean las que corresponden a ese formateo: los niños a la incubadora, al kinder, a la escuela y, más tarde, a la competencia laboral, la maternidad re-productora de este destino o incluso, al desempleo. En efecto, en cuanto entramos al mundo entramos en una compleja trama de relaciones que se encargan de dar dirección no sólo a nuestra condición social, sino también a nuestra percepción sensorial, pero también a la domesticación de nuestros afectos: aprendemos no sólo lo que está bien y lo que está mal hacer, sino también lo que hay que querer y lo que hay que despreciar. Y todavía más: aprendemos que un árbol es un árbol y no, por ejemplo, un “campanario de trinos dorados” o cualquier otra cosa.

Y, como se puede comprobar, las formas de vida diferentes se vuelven de inmediato amenazadoras, de manera que o bien, son minimizadas o ninguneadas bajo la etiqueta de la locura o lo anormalidad o bien se les aplica doble porción de la maquinaria de domesticación:

Todo lo que es del dominio de la ruptura, de la sorpresa y de la angustia, pero también del deseo, de la voluntad de amar y de crear, debe encajar de alguna manera en los registros de las referencias dominantes. Existe siempre un arreglo que intenta prever todo lo que pueda tener la naturaleza de una disidencia del pensamiento y del deseo. Hay una tentativa de eliminar aquello que llamo procesos de singularización. Todo lo que sorprende, aunque sea levemente, debe ser clasificable en alguna zona de encasillamiento, de referenciación. No sólo los profesores, sino también los medios de comunicación de masas (los periodistas, en particular), están dotados para ese tipo de práctica.

Así, imaginar otras formas de vida que esquiven la normalización rígida no es una tarea sencilla: pasa al menos por
  1. tener el valor de imaginar y tomar acciones concretas

  2. la parte más fatigosa tiene que ver con un costante acecho a los hábitos propios y ajenos que reproducen el rígido sistema.

  3. y, además, encontrar las dinámicas de interactuar con y aprovechar las dinámicas del mundo capitalista.
    Es una labor de intento constante, de vislumbres y fatigas, pero además de astucia y creatividad para no recaer en la frustración o en la reproducción de moldes inoperantes...

    ...Apartir del momento en el que los grupos adquieren esa libertad de vivir sus propios procesos, pasan a tener capacidad para leer su propia situación y aquello que pasa en torno a ellos. Esa capacidad es la que les va a dar un mínimo de posibilidad de creación y exactamente les va a permitir preservar ese carácter de autonomía tan importante.
Imaginar otra forma de vida, implica, entonces imaginar un colectivo rico en diferencias, pero también “libre de vivir sus propios procesos”, autogestionado no sólo en la administración económica, sino también en la administración de los afectos. Un colectivo que siempre “está tomando forma”, pues siempre está en proceso.

He aquí, desde mi punto de vista, lo complejo de la generación de una comunidad:
-que activa las resistencias del régimen dominante (en uno mismo y en los demás).
-que requiere imaginarse la tarea como una sucesión de intentos sin fin. No sólo se trata de ensayo y error sino también de pensar que jamás la tarea está concluida y en esto reside su singularidad.
-que exige una cierta negociación constante con lo desconocido.
-que exige pensar en términos menos individuales para acceder a una conciencia común.
-que exige deshacerse de pensamientos melancólicos y de frustración
-que pide evitar la proyección de asuntos familiares no resueltos en los demás integrantes. No se trata de hacer “otra familia”.

Pero, más allá de la complejidad -y ustedes lo saben mejor que yo-, qué mejor manera de pararse frente a la vida que intentando darle la cara con alegría, inventando un nuevo concepto de tiempo en el que las generaciones por venir puedan escapar de la eterna herencia del resentimiento y, a su vez, se puedan hacer cargo de su presente. Generaciones que erradiquen en lo posible las pasiones tristes y la infantilización a la que se nos quiere condenar. Generaciones para las que las palabras respeto, dignidad, poesía, pensamiento y juego pertenezcan a un mismo movimiento del cuerpo. Generaciones, en fin, que acepten que la vida es digna de ser vivida a plenitud. Y todo esto desde su hermosa trinchera de co-madres.

Con mi admiración y agradecimiento, Rubén Ortiz, padre de la COmunidad COmadres. 

Comentarios

  1. muy hermoso!!!

    me llena de alegria saber que estamos haciendo un buen trabajo y que nos dejamos llevar por nuestra intuicion, nuestro amor de padres, que navegamos contracorriente y que dejamos a nuestros bebes expresarse, elegir y disfrutar sin complicaciones desde tan temprana edad, nosotros guiamos mas no imponemos, nuestros bebes llegaron a mostrarnos que la vida es mejor de lo que nos contaron, que esta llena de pequeños grandes momentos que se disfrutan cada dia y claro que estamos contribuyendo para estas generaciones que erradicaran todo mal y haran un mundo mejor.

    muchas gracias a Ruben por apoyar y ser complice y admirador.

    Saludos co-madres, bebes

    grace y verena

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  2. sin palabras y ccn muchas lágrimas!!
    gracias, lila por compartirlo, gracias, rubén por tus palabras, por "vernos" y darle valor a nuestro esfuerzo.
    lo leeré cada vez que la tarea me parezca irrealizable...

    beso grande!!

    Maeibel y Lu

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